El tomar decisiones no es nada fácil, requiere de muchas funciones de nuestro cerebro funcionando al más desarrollado de los niveles (madurez) y en conjunto entre sí. Por lo tanto, imaginen cuando han tenido que hacer un trabajo en equipo y en su equipo hay dos personas que son líderes y otros que también quieren que sean tomados en cuenta sus opiniones, ¿era fácil o difícil trabajar con ellos?
Para que nosotros podamos tomar una decisión tenemos que poner de acuerdo a nuestro pensamiento abstracto, a la visión a largo plazo al mismo tiempo que a nuestra memoria, además de tener en cuenta todas las emociones y sentimientos que se generen en este proceso. Todas estas funciones están albergadas en el lóbulo frontal de nuestro cerebro, zona que termina su desarrollo en la adolescencia. Por lo tanto, si te das cuenta, elegir una carrera en realidad no es tanto LA decisión de tu vida, sino es la PRIMER decisión de tu vida.
En esta la primer decisión poniendo de acuerdo a todos los miembros de nuestro equipo cerebro, tiene como objetivo el poder elegir algo que te guste, que seas bueno y que sobre todo no te haga arrepentirte de tu decisión. El arrepentimiento viene cuando usas mucha de tu energía en pensar "que hubiera pasado si elegías otra de las opciones", en lugar de aprovechar esa energía para avanzar y trabajar en lo que ya has decidido. Es por esta razón, que es importante que conozcas cómo se organiza tu equipo cerebro y cómo puedes ayudarle para que así puedas ir del hubiera al "esto yo lo decidí así".
Entonces, aquí viene la guía rápida para organizar a tu equipo cerebro para la toma de decisiones:
- RECONOCE AL LÍDER: El líder de este equipo, como ya lo mencionamos antes, son las emociones y sentimientos. ¿Qué no son lo mismo? No, las primeras son las reacciones físicas (de tu cerebro y todo tu cuerpo) que tienes ante un estímulo; mientras que el sentimiento, es la percepción o interpretación que hacemos de esas emociones, es decir, es como tomamos conciencia y hablamos o hacemos símbolos a través del lenguaje de esas emociones que percibimos, por lo tanto son respuestas que ya tienen tiempo de ser así y en muchas ocasiones no son nuestras sino que son aprendidas de otras personas.
- CONOCE AL LÍDER: Saber cuáles son los gustos y formas de trabajar de alguien con el que estarás colaborando facilita todo el trabajo, pues entonces tómate siempre el tiempo para reconocer y evaluar las emociones y sentimientos que estás sintiendo al tomar una decisión. Por ejemplo: Si te llama la atención ser ingeniero pero tu familia tiene una gran historia de médicos, y tu sientes nervios de romper esa tradición o te duele la panza, o te da miedo o incluso puedes sentir entusiasmo de no ser médico, todas esas respuestas son importantes de reconocerlas.
- TRABAJA CON TUS EMOCIONES: No todo en esta vida son hechos, hay cosas igual de importantes que no son tangibles, medibles o incluso explicables, como las emociones y sentimientos, pero hablar de ellas y sentirlas es una forma de irlas conociendo y manejando. Sé que no es fácil hablar de nuestras emociones o sentimientos en nuestra sociedad, pues son un símbolo de vulnerabilidad, pero si tu las sigues ocultando por esta creencia, entonces tú también eres parte de que esa creencia prevalezca. Lo que sientes es TOTALMENTE VÁLIDO, pero para que lo sea tú eres el primero que debe de darse el tiempo de sentirlo. En este paso es donde un gran amigo (que realmente lo sea), un terapeuta o un orientador o maestro de vida puede ser de mucha utilidad, para que puedas hablar de cómo y dónde sientes lo que sientes y con qué lo relacionas.
- REVISA TUS OPCIONES: Analiza cómo te hace sentir cada una de las alternativas disponibles para tu elección, incluso la posibilidad de no decidir todavía, o como comúnmente decimos, decidir no hacer nada. Aquí seguramente vendrán muchos pensamientos, recuerda que lo más importante es guiarte por tu líder, entonces todos esas ideas o creencias que lleguen a tu pensamiento analízalos desde el punto de vista del líder: tus emociones. No lo olvides.
- TOMA LA DECISIÓN: Una vez que ya has revisado cómo te hacen sentir todas y cada una de tus opciones, elije aquella que te permita fluir con más facilidad y en la que sientas que gozas seguir ese camino. ¡OJO! Una advertencia en este cuento, gozar no siempre es el camino fácil donde no tendrás obstáculos, el gozo implica que a pesar de las dificultades puedes sentirte conectado con lo que haces y te sientes "equipado" para enfrentar los obstáculos que se presenten.
- CUIDA TU VOZ DE JUEZ: Todos nosotros tenemos una vocecita en nuestra cabeza que le encanta juzgar y comparar todo lo que hacemos, si tu haces con convicción y conciencia los pasos del 1 al 5, será más fácil convencer a tu vocecita juez que lo que estás haciendo es lo "correcto". Es este juez el que nos hace dudar y pensar en el hubiera, pero su habilidad de hacernos pensar en otras opciones viene de la inseguridad que tenemos al elegir, y esa inseguridad proviene de que no solemos hacerlo PLENAMENTE NOSOTROS, sino que nos guiamos por los pensamientos, creencias u opiniones a nuestro alrededor, pero pocas veces nos tomamos el tiempo de revisar si todo eso es de nosotros o de otros y cómo nos hace sentir eso que pensamos.
Con estos 6 pasos llegamos al final de la guía rápida para tomar decisiones. Es importante mencionar que arriba hablamos de decisiones "correctas" (así entre comillas), porque recuerda que lo que es correcto para alguien no puede serlo para otra persona, todo depende de lo que le haga sentir y de su propia historia, la conciencia es singular y por eso es una gran tarea el poder reconocer esa singularidad en nosotros y en los demás y respetarnos mutuamente. Así que, si te das cuenta, volvemos al principio de esta historia: ¡Es super importante saber y reconocer nuestras emociones!
Espero que te hagan sentido y recuerda que puedes dejarnos tus comentarios en este espacio o en las redes sociales. O puedes escribirnos un correo a ximena@eligetuvida.net
Comentarios
Publicar un comentario